Acérquese a Dios

Santiago 4:7-12

En ese caso, ¿cómo es posible vivir en un mundo 🌍 tan lleno de placeres y atracciones mundanos?

¿Cómo podemos mantener el afecto 🤗 a las cosas espirituales cuando estamos rodeados por tentaciones para complacer a nuestro ego y buscar 🔍 nuestra gratificación personal?

Muchos cristianos no llegan ni siquiera a darse cuenta de que tratar de hallar su realización en las cosas mundanas los pone en un conflicto directo con Dios.

Tal vez 🤔 usted haya caído en la trampa 🪤 de confiar en que las cosas de este mundo le den sentido y gozo a su vida. Ese camino solo puede terminar en la desilusión.

Lo sabio es centrarnos en nuestra relación con Dios.

Acercarnos a Él.

Buscarlo con todo el corazón ♥️.

Santiago presenta una valiosa fórmula para llevar a su vida un enfoque correcto.

En Santiago 4:7-10, menciona siete claves que lo pueden ayudar a entrar en sintonía con Dios y hallar la realización personal que usted desea : Sométase a Dios ; resístase al diablo 😈; acérquese a Dios ; resístase al diablo 😈; acérquese a Dios; límpiese las manos ; purifique su corazón ♥️; laméntese de sus pecados pasados ; humíllese delante del Señor.

Estas cosas pueden ser difíciles .

Nos despojan de la clase de exaltación del ego que deseamos con tanta frecuencia, al llamarnos a una humilde sumisión a Dios. Nos obligan a reconocer nuestros pecados , aunque encontremos en Cristo la seguridad del perdón 😥.

Dios nunca se aleja de los creyentes .

Cuando su relación espiritual con Dios se enfría, no es Él quien se ha movido .

Se trata de una grave indicación de que usted se ha ido a la deriva.

No obstante , Dios está esperando a que usted se le vuelva a acercar.

Todo lo que le exige es que reconozca quien es Él, y que ha hecho por usted.

Cuando se someta a Él, rechazando los principios mundanos que lo guiaban en el pasado, esto marcará el comienzo de un nuevo caminar 🚶🏻‍♂️, en el cual Él lo irá guiando .

En Santiago 4:11-12 , el autor se centra en los conflictos dentro de las relaciones, demostrando que si los cristianos le someten su vida a Dios, no se sitúan en la posición de juzgar a los demás.

La sumisión a Dios exige a los cristianos que dejen que sea Él quien los juzgue.

Entre los cristianos no hay lugar para la traición ni para la calumnia .

Los cristianos hemos sido llamados a restaurar; no a condenar .

Tal vez llegue un momento en que una persona se niegue a ser restaurada, y se deban tomar decisiones en cuanto a la confraternidad con ella ( véase Mateo 18:15-17; 1 Corintios 5:1-5). Pero nunca les toca a los cristianos condenar a alguien atrapado en pecado. En lugar de esto, debemos edificar y restaurar a los demás, dejando que Dios los juzgue.

¿Cuál de las siete claves de la realización espiritual constituye el mayor desafío para usted ?

¿Por qué cree usted que es difícil ser humilde?