La paz entre Israel 馃嚠馃嚤 y Siria 馃嚫馃嚲 no dur贸 mucho tiempo. Pronto , el rey 馃ご de Siria declar贸 la guerra a Israel , arm贸 su ej茅rcito y reuni贸 a sus oficiales para planear un ataque. Pero Dios advirti贸 a los israelitas , a trav茅s del profeta , que no pasar谩n por all铆, as铆 que el ej茅rcito sirio no pudo llevar a cabo su ataque . Al ver que no hab铆an podido cumplir su plan, el rey sirio llam贸 a sus oficiales y pregunt贸 :”¡¿Quien de ustedes nos esas traicionando ?! ¡¿C贸mo es que los israelitas han sabido de nuestros planes y no han pasado por aqu铆 ?!”, uno de sus hombres respondi贸 : “Ninguno de nosotros es un traidor , mi rey 馃ご. Eliseo , el profeta, es el que le dice a los israelitas que hacer “. El rey sirio se enfureci贸 y decidi贸 arrestar a Eliseo, y envi贸 a sus tropas a su ciudad. A la ma帽ana siguiente, cuando el sirviente de Eliseo despert贸 , descubri贸 que la ciudad estaba rodeada, y corri贸 a advertir a su amo. “¡Estamos rodeados de enemigos , se帽or ! ¡Ay! ¡¿Que haremos ?!”, dijo . “No tengas miedo 馃槦 “, respondi贸 Eliseo , “ te aseguro que, con la ayuda de Dios, seremos m谩s fuertes que todas sus tropas “. El profeta or贸 para que las tropas enemigas se volvieran ciegas, y eso ocurri贸 . Entonces los gui贸 a Samaria y, al llegar all铆, recuperaron la visi贸n. Al ver aquello , el rey 馃ご de Israel le pregunt贸 a Eliseo : “¿Que haremos ahora con esta gente ?”. El profeta le aconsej贸 :”Debes alimentarlos y luego enviarlos de vuelta a siria 馃嚫馃嚲 “. ¡Debemos ser justos incluso con nuestros enemigos, pues esa es la voluntad de Dios!
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